domingo, 18 de mayo de 2008

Una mirada desde el interior

Por Marlene Vallejos*


Si hay un tema del que se ha hablado mucho en este último tiempo fue el conflicto del campo y sus encontronazos con el gobierno de la “Señora K”.
Opiniones enfrentadas, desacuerdos constantes, cortes de ruta, negaciones a un dialogo abierto…. Son algunos de los “ingredientes” que forman el marco que nos aleja cada vez más de una posible solución.


Desde el comienzo del conflicto, el tema pasó a ser portada de los principales medios de comunicación nacionales e internacionales y a “dominar” la charla argentina de todos los días: en la calle, en el bar de la esquina, en las escuelas, en los asados de los domingos…. Todo es Campo. ¿Y esto por que?


La respuesta es sencilla, TODOS somos el campo aunque no trabajemos en él, todos diariamente consumimos productos provenientes de la tierra argentina y si nos remontamos a nuestros antepasados es más que seguro que no encontraremos con algún abuelo, o bisabuelo que en algún momento de su vida trabajó la tierra.

Es por esta simple razón que ningún argentino puede darle la espalda al campo mucho menos en este momento en donde intenta hacer escuchar sus reclamos, si no nos unimos todos esto es imposible, pues el campo se caracteriza por realizar su trabajo de manera silenciosa sin grandes pretensiones y al tener este perfil pasivo es muy importante que estemos todos juntos para si formar un “Solo grupo defensor del campo” como dijo en su momento Alfredo De Angeli.



Una pregunta interesante que nos podríamos realizar es la que se repite de manera constante en la canción del campo: ¿Qué pasó? Parece tan sencilla y sin embargo su repuesta es tan compleja y variada porque las cosas que pasaron para llegar a este “Tire y afloje” del que hoy somos partes, fueron muchísimas pero creo que la principal y mas importante fue la falta de un dialogo constante, comprometido y serio por parte de nuestro gobierno…Producto de un pensamiento algo egoísta que todos alguna vez tenemos… Sí, todos.

Primero tenemos que saber que la situación de un país no se cambia de un día para otro sino que es un proceso que puede llevar años y años. Pero que es lo que pasa, ninguno de nosotros en esa mentalidad de argentinos estamos dispuestos a realizar cambios que no vamos a ver y, según parece, mucho menos nuestra señora presidenta, Quizás si tuviéramos un poquito de la mentalidad de San Martín o Belgrano que lucharon por nuestro país sabiendo que no iban a poder ver los cambios, la historia seria otra ¿No les parece?

Pero en fin, vivimos en la época mas desarrollada de la historia lo que hace que la mentalidad el hombre sea otra y piense solo en él para lograr su bienestar personal y si el otro se perjudica. No importa.
Volviendo al tema del campo concretamente, las modalidades de protestas fueron muchas, tractorazos, “mateadas”, cacerolazos pero la que sin duda causó más molestar social fue el corte de rutas que generó mas de un problema entre los chacareros, camioneros y gente del gobierno.


Las imágenes que presento en esta nota son de la rotonda de acceso a la ciudad entrerriana de Chajari al noreste de la provincia, donde el apoyo al campo se nota día a día, toda la comunidad en general, pertenezca o no al campo, dice presente al reclamo desde su lugar de ciudadanos argentinos.


En conclusión podría decir que lo mejor para este tipo de conflictos es paciencia mucha paciencia y que cada uno de nosotros ponga lo mejor de si mismo para aportar a un pensamiento mas positivo.


*Marlene es estudiante y vive en Chajarí, Provincia de Entre Ríos

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buena reflexión Marlene como siempre. De acuerdo en lo que decis. y ante todo paciencia. Saludos.

Solange Crispín dijo...

Es una guerra de nunca acabar. Hay que ver que sucede en estos días....paro mas paros...o soluciones concretas! Muchos dichos y pocos hechos!

adios!

buena nota